La noticia: el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación ha publicado las subvenciones concedidas a las oenegés dedicadas al desarrollo. A ver, apuesten ¿quién ha sido la más beneficiada? La del PSOE. Es decir, la conocida Solidaridad Internacional. ¿Por qué sé que es del PSOE? Pues porque estuvo presidida por Leire Pajín, actualmente la preside el ex-ministro Eguiagaray, y cuenta entre algunos presidentes de delegaciones autonómicas, por ejemplo, la andaluza, con personas que emulan a los dioses si atendemos a su don de la ubicuidad: Cristina Hoyos Panadero. Sí, está en todas partes. En la SGAE, en Iberautor Promociones Culturales, en Solidaridad Internacional como «honorífica»… en fin, un prodigio de mujer. Recordemos que por sus hechos les conoceréis y, cuando la ministra Aído era directora de la Agencia del Flamenco, Antonio Burgos escribía acerca de «los gorrones de Guadalajara» (400 personas financiadas por la Junta de Andalucía que fueron a promocionar el flamenco a la Feria del Libro de Guadalajara, México) de esta manera
«Claro, por eso tienen que reforzar la embajada cultural. Venga, flamenco, mucho flamenco. Como saben, no hay nada que tenga más que ver con los libros que el flamenco. A Guadalajara, de gorra, han ido la directora de la Agencia del Flamenco y la directora del Centro Andaluz de Flamenco. Y la inevitable Cristina Hoyos, que es al régimen de Chaves como las castañuelas de Lucero Tena al franquismo«.
Eso. Burgos, inimitable.
Pero volviendo al tema de la ayuda y las subvenciones de la AECID. ¿Y qué si esta gente lo hace fenomenal y ayudan a que desaparezca el hambre y la miseria sobre la Tierra? Bueno, financian proyectos como el asesoramiento y formación en Derechos Humanos a la población de los altos del Golán y Palestina, asesoramiento jurídico a palestinos detenidos en territorio palestino y en Israel, cursos educativos de transformación de las relaciones de género en Usulután (El Salvador), fortalecimiento de los derechos sexuales, reproductivos y de salud mental ante la institucionalidad en Quetzaltenango (Guatemala), desarrollo alternativo, participativo y sostenible de ecoturismo en 15 comunidades indígenas de Quiché, y la instalación y establecimiento de cinco oficinas municipales de la mujer en tres departamentos indígenas de Centroamérica… y muchos más.
Suenan raro ¿no?
Pero aún así ¿y si esa es la manera? Pues incluso si esos son los proyectos que los pobres necesitan… la AECID está incumpliendo las normas que ella misma estableció en la convocatoria. Como señala el ABC, en los puntos 6.8 que establece que «el importe total de financiación que podrá recibir un beneficiario no podrá superar los cinco millones al año, incluyendo todos los instrumentos de cooperación de la AECID, excepto la ayuda humanitaria». En el caso de la organización Solidaridad Internacional, todos los años supera esta cantidad.
Pero además está el punto 6.7 según el cual «el máximo presupuestario de los convenios será de veinte millones de euros para el total de los cuatro años». El dinero concedido a la ONG socialista ha recibido 29.881.595 euros para una programación plurianual (2010-2013), la mayor que se ha concedido a una ONG en este capítulo de convenios. A nadie sorprenderá la meteórica ascensión de esta Fundación en el ranking de ONG con subvenciones gubernamentales. Mientras que en el año 2007 ocupaba el puesto 14, en 2008 pasó al puesto 11 y en 2009 ya se encaramó al 5.
Esto sí que es un acontecimiento planetario, Leire. No está sola, eso sí. La «Fundación Mujeres», vinculada a la secretaria de Relaciones Internacional del PSOE, Elena Valenciano, que ha recibido la cuantía más alta de las ayudas de la convocatoria permanente y abierta para actividades de cooperación y ayuda al desarrollo repartidas por la Aeci en la resolución de 23 de diciembre de 2009, publicada en el BOE de 30 de enero. Se le han adjudicado 422.675 euros.
Claro, cuando pregunto a mis amigos pobrólogos de a pié, sensatos, sin un duro y con una visión real del tema, por qué las demás ONG no denuncian estas irregularidades me dicen «oye, es que a Cruz Roja Española (27.450.000), Intermón (24.700.000), Cáritas Españolas (15.100.000) o Médicos del Mundo (19.000.000, les conviene que les sigan dando algo…».
El precio del silencio. Más de lo mismo.